Marta, María y las prioridades de la vida 22-julio-01

MARTA, MARIA Y LAS PRIORIDADES DE LA
VIDA
Reflexión sobre Lucas 10:2842
Rev. Roberto Pineda*

Jesús se encuentra siempre en el camino, de aldea en aldea, sanando enfermos, expulsando demonios, reclutando nuevos miembros, polemizando con los fariseos y maestros de la ley, proclamando la buena nueva del Reino. Su misión era caminar y anunciar el mensaje de salvación. En el camino, llama a la conversión a las multitudes mientras a otros los llama al seguimiento. Cuenta con contactos del movimiento en las poblaciones que visita, con casas de seguridad, son personas probadas, militantes del reino, seguidores fieles.

En este texto se nos narra la visita a una de estas casas de seguridad. Jesús visita a dos hermanas, amigas suyas. Una se llama Marta y la otra Maria. Ambas eran personas de confianza de Jesús y del movimiento, pero manifiestan actitudes diferentes ante su persona y mensaje. Estas actitudes son paradigmáticas y las encontramos en la actualidad de nuestras iglesias y sociedades.

A María nos la encontrarnos atareada con sus muchos quehaceres, absorbida por las labores hogareñas, sumergida en el activismo de la casa. Atrincherada en este espacio de laboriosidad, incluso se atreve a acusar a su hermana de irresponsable por no ayudarla. María no tuvo tiempo para atender a Jesús, para escucharle, para aprender de sus enseñanzas.

Maria por el contrario, desde el primer momento decidió sentarse a los pies de Jesús para escucharlo, para oír su mensaje. Se deja seducir por la palabra de Jesús, entrega toda su atención, se preocupa por entender los misterios del Reino. Rompe con los esquemas de la cotidianidad ante el acontecimiento fundamental de su vida: la presencia de Jesús en su casa. Convierte desde ese momento a Jesús en el centro de su vida.

Ante el reclamo de Marta sobre la conducta de su hermana, Jesús le responde con dulzura: Marta, Marta, la repetición es significativa. Hay un reproche cariñoso. Jesús lamenta que ella no comprenda. Le entristece que Marta este ciega, “preocupada y afligida, por muchas cosas”. Jesús trata de ayudarle a que entienda, a que vea, a que reaccione. El texto no nos revela la respuesta de Marta.

En esta historia, Jesús rompe con los convencionalismos sociales, establece abiertamente amistad con dos mujeres. Las visita, platica con ellas. En una sociedad androcéntrica Jesús se atrevió a romper con los patrones machistas. Se atrevió a ser y actuar de manera diferente. En su época, esto fue escandaloso Esto fue un desafío a las autoridades y a la cultura establecidas.

La figura de Marta representa nuestras prioridades en la vida. Siempre estamos ocupados, demasiado ocupados, en nuestras pequeñeces como personas y como país. Como país estamos preocupados por la suerte de Betty la fea, por los partidos de fútbol de la Copa América, por el estreno de Loco Fin de semana en los cines, etc.,etc.
La actitud de Maria es diferente, es un reto. es la persona que escucha, que aprende, que analiza, que busca, que decide seguirle, es una decisión difícil, porque es nadar contra la corriente, significa involucrarse, meterse en problemas, preocuparse por los demás, comprometerse con el anuncio del reino, etc.,etc.

Nuestra sociedad, por lo general, sigue los pasos de Marta. Nosotros, por lo general, seguimos los pasos de Marta. Nos encontrarnos saturados de múltiples actividades No nos preocupamos como Maria de “escuchar lo que él decía”. Es un asunto de prioridades, de cambiar el rumbo de nuestras vidas, no hacia una interiorización escapista sino hacia el compromiso con los que sufren y con los que sueñan.

*Pastor de Iglesia Luterana salvadoreña.
Cuscatlán séptimo domingo después de Pentecostés del año 2001